Durante las primeras horas de la mañana, los espectadores se iban
colocando en los asientos de la Arena de Cadwallon, personajes variopintos
ocupaban la zona y eso complicaba el trabajo a Als y sus agentes asignados, no sabrían
hasta el inicio del torneo quien podría ser un mago que pudiese atentar contra
el torneo o un espectador normal.
Llevaban más de una semana organizando la
seguridad del sitio, pero sus pocos hombres hacían ridícula la intervención si
hubiese un ataque a gran escala, solo eran una docena de paladines de Alahan,
templarios Grifos y algún miembro de la milicia de Cadwallon, nada que una
fuerza grande y bien preparada no pudiese repeler. Als contemplaba
constantemente el palco de autoridades, aun no había venido el Duque, pero ya
se podía ver a un montón de invitados...Entre ellos un Ofidio estaba entre las
sombras y su paladín esclavo hacia acto de presencia en la primera línea, esto
era una deshonra para los miembros de la Luz que se preocupaban por esta
ciudad.
La matanza iba a comenzar, los Devoradores
se controlaban dando vueltas dentro de su línea de inicio hasta que se diese la
señal de que el combate iba a comenzar, mientras los semielfos contemplaban
pasivamente al enemigo, un enemigo que en realidad era hermano de batalla y lo conocían
bastante bien, conocían sus brutales ataques, pero también sus flaquezas y en
eso se concentraban los tres semielfos.
Una vez comenzado el combate los
Devoradores quedaron paralizados unos segundos, algo que dio tiempo a los
Semielfos para acercarse a las temibles bestias y avanzar a una posición mejor.
Mientras en la grada los hombres de Als miraban a los espectadores: "eso debió
ser magia"-Pensaron todos al mirarse unos a otros, impotentes sin saber a quién
detener...
El combate siguió con normalidad y la
brutalidad con la que respondían los lobos era muy difícil de contrarrestar,
uno de los Semielfos cayo de repente y su cabeza lo hizo un segundo después, la
estrella del cazador había acertado de lleno. Además pudo darle tiempo para ayudar al
Voraz en su combate contra el ambidiestro semielfo, que pese a estar herido
intentaba defenderse de ambos frentes.
Pese a que el combate estaba siendo
intenso y rápido, el Duque decidió ordenar que adelantaran los hechos, algo que
frustro a muchos espectadores debido a que una ristra de virotes impactó a algunos luchadores y uno de los Voraces cayó muerto. Los ballesteros cargaron
sus armas por si había una próxima orden. Esto crispó los ánimos en el palco,
Alahel no supo aguantar su compostura y golpeó con rabia el muro de piedra, una
mirada se desvió hacia aquel gesto, era la del Apostata Ofidio que sonreía
debajo del casco.
Se acercaba el fin del combate, el
guerrero de sangre iba a ser superado en número por las bestias del Vile-Tis
cuando de la nada apareció un clon suyo, ¡de metal! La sorpresa fue mayúscula,
el público aplaudió a rabiar y Als se hecho la mano a la cabeza, esto no había
quien lo controlara, un hechizo tan complicado lo habían hecho delante de ellos
y nadie había visto nada...Mientras el clon reaccionó rápido y cargó al
Cazador, se movía como un Semielfo normal y cuando lo golpeaban sonaba a
armadura, pero nada lo frenaba, el Devorador se acobardó durante unos segundos
que veía que no podía frenar a la ilusión.
Pasado un minuto el clon se desvaneció y
el Semielfo quedó a merced de sus cazadores...Acorralado en la esquina fue
masacrado y varias partes de su cuerpo se las comieron los Devoradores mientras
aullaban al público, mostraron su versión más grotesca sin ningún tapujo.
Después del evento, Als y sus hombres se
reunieron para comentar como podían solucionar este tipo de situaciones, nadie quería
ver amaños en los combates y menos a magos actuando con facilidad dentro de un
recinto con tanta gente. Cuando terminó de exponer sus ideas, una sombra se acercó
por la espalda y comento: Perdone que moleste, pero creo que deberían dejar a
la gente de aquí ocuparse del trabajo sucio, nosotros somos los que conocemos a
nuestras gentes y estamos acostumbrados a saber investigar en sitios complejos,
déjenme a mí el mando- dijo el Capitán Durak con una sonrisa de lado a lado de
la cara.
Andanda..que interesante se pone la cosa..
ResponderEliminarLa segunda parte de este combate ha sido parecido al del anterior torneo, combate cerrado aunque siempre con mas posibilidades de ganar para los Devoradores, veremos los siguientes y hasta donde llegan los lobos...
EliminarUn saludo.