2º ronda del Torneo de las Siete Finales: Alquimistas vs Orcos


Als continuaba su paseo matinal por los distintos feudos de Cadwallon, hoy le tocaba buscar información en Autómata y ya que estaba por ahí que le pusieran a punto su equipo. Mientras esperaba un elfo se le acercó y lo miró fijamente.

-Usted es el agente del León, ¿no es cierto?- pregunto el elfo.
-Así es, ¿podría ayudarle en algo?-respondió cordialmente el humano.
-Claro que no...Los humanos no sois capaces ni de ocuparos de vuestros asuntos como para otorgaros problemas más trascendentales...Solo quería avisaros de que no estáis investigando todo lo que deberíais investigar, hay algunos de los nuestros que quieren tomarse la venganza por su parte y no van a temblar frente a unos cuantos agentes como usted-termino el elfo mientras se quedó callado con los ojos observando fijamente al humano.
-Entiendo, todo el mundo me dice una cosa diferente en cada feudo que voy, creo que voy a empezar a olvidarme del tema, no creo que entienda el humor cadwë, porque al parecer eso es lo que es...Simplemente humor.-respondió resignado Als.

Tras recoger sus armas, Als continuó hacia el graderío del Foso, la Arena hoy estaba con aforo completo, los humanos y orcos de la zona habían acudido en masa para lo que ellos denominaban: un combate ¡brutal! Seguramente tenían razón, pero no se si alguno de los presentes pensaba en la estrategia que tenían los Alquimistas, los cuales habían ganado siempre a base de fuerza y saber actuar en los momentos difíciles.


El combate comenzó en el Foso, ambos bandos se lanzaron rápidamente el uno contra el otro, uno de los orcos fue acorralado contra el muro del graderío por el Kerati y el clon Belisario todo un reto salir de ahí con vida, pero lo intentaría hasta el final. Por el otro lado unos cuantos combates normales entre clones y chacales se darían de una manera más espaciosa.




Como era de prever todo sucedió muy rápido y el orco acorralado contra el muro fue atravesado por la alabarda del Kerati mientras el Belisario remataba al inmovilizado cuerpo. A su vez los orcos que estaban luchando contra los clones no habían sabido manejar su violencia y pese a herir a todos sus rivales uno de ellos había sido acuchillado hasta la muerte y el otro estaba herido por culpa del guerrero del alba, la historia no pintaba muy bien para el bando orco.


Tras una serie de movimientos bruscos por parte del orco que intentaba hacerse espacio con tanto rival que lo rodeaba, terminó de acercarse otro rival, el Belisario se unió a la tangana mientras que el Kerati se acercaba con velocidad hacia el orco ballestero, un ballestero que torpemente no había podido acertar a ningún rival salvo una pequeña herida superficial al Kerati antes de que lo cargase. 


Todo acabó como estaba previsto, rápido, brutalmente violento y sin bajas, así eran los Alquimistas y no quedaba duda que estaban a un gran nivel como equipo, pese a que en el anterior combate habían sufrido algo contra los Drunes, esta vez no y por segunda vez se enfrentarían a sus rivales de la final del torneo de Arcavia.

Como había terminado pronto el evento, Als recibió la visita de Alahel junto a unos cuantos camaradas que lo seguían, Als se encontraba sentado en las gradas, estaba acomodado de una manera bastante cómoda e informal para su cultura, pero estaba cansado de todo y sobretodo de ver que al final los Alquimistas con trampas o no llegaban de nuevo a la final.

-Querido amigo, no te frustres estaba todo previsto, los orcos no eran rival para unos Alquimistas tan astutos, además esto nos permitirá que nuestro enemigo caiga en la trampa con más facilidad.-dijo tranquilamente Alahel.
-¿Qué quieres decir Alahel, acaso sabes quién esta detrás de todo?-respondió con algo de rabia contenida su subordinado.
-Claro que sí...Mañana veras como acaba el evento, ya lo tengo todo bajo control, tu solo tienes que seguir a los paladines que he puesto a tu orden una vez te ubiques en la salida cinco del foso.-ordenó con más calma Alahel.
-Entiendo...Pero creo que necesitaré una explicación cuando pase todo esto.-dijo Als tragando saliva, miro hacia el resto de compañeros y no supo que hacer, así que se levantó y se marchó del lugar sin despedirse. La humillación había sido absoluta, tantos días de investigación a ciegas para que al final todo el mundo lo supiese...

-Me da lástima no informar del todo a un buen investigador, pero tal vez pondría en peligro la misión, es mejor así o eso espero, además no sabemos que nos puede esperar mañana realmente, solo sabemos de uno de los posibles atacantes, pero sabemos desde el principio que son dos...-dijo Alahel para sus acompañantes.
-Tranquilo, lo entenderá cuando pase todo esto, si sale todo bien...-respondió uno de los leones.


Las gradas se encontraban vacías, llenas de restos de comidas, bebida derramada, bolsas y demás objetos olvidados, en la arena el espectáculo había acabado, pero los esclavos se llevaban los cadáveres de los orcos y echaban tierra sobre la sangre, la decadencia venia siempre después del espectáculo, pero nadie se quedaba para ver esto, no era bonito de ver, salvo para un hombre o algo parecido...El biopsista Alquimista aguardaba en el palco observando en silencio como trabajaban los esclavos y en definitiva como se iba tejiendo su obra maestra.

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